viernes, 24 de septiembre de 2010

Mansfield Park

Que Jane Austen es una de mis escritoras favoritas, a estas alturas del blog, no es ninguna sorpresa. El otro día, en la Biblioteca, buscando la tan ansiada tercera parte de Millenium y no encontrando otro libro con el que entretenerme durante la semana, encontre Mansfield Park. A pesar de ser una gran consumidora, a veces en exceso, de las series de la BBC de índole romántico y para más señas, si vienen con el sello de Austen, no me la había leído, aunque sí que era cierto que me he visto no sólo una versión, sino varias, y no una vez sino var de Mansfield Park.

No puedo decir que no me haya gustado, porque en general, la escritura de Jane Austen y su forma de contar las cosas, y no sólo por sus historias me encanta, pero me llevé una gran decepción, y esto sólo lo puedo achacármelo a mí, por ver las series primero, en vez de leerme el libro. Me ha pasado con algunos libros, y con algunas películas...ahora por norma general o me lo leo, o lo veo, pero no las dos cosas. Llevar una novela al cine o a una serie de TV, no debe ser agradable, cuando leemos tenemos una visión muy personal de cómo son las cosas, y lo que te parece a tí importante para otra persona no lo es, lo que te parece interesante o destacable para otro no. Las Películas tienen una duración determinada, cuestan dinero, y lo que es más importante, en la taquilla no sólo no hay que recuperarlo sino multiplicarlo, por eso, muchas veces se busca "el gusto de la masa" adaptar algo a los nuevos tiempos o a la mentalidad de la época, por eso las versiones.

A que viene todo esto, es sensillo, entre la novela y las diferentes versiones hay cambios, no sólo hay cosas que no me han cuadrado, sino que la imagen de Fanny Price que tenía en mente y basada en las películas no tiene nada que ver con la que me he encontrado en el libro, mucho más sumisa, recatada, menos alegre, y porque no, más anodina. El ideal de mujer en aquella época.

Sí en las versiones tanto del 99 como del 07, nos hubiera dado esa imagen, nuestra heroína nos hubiese parecido mustia, una mujer que ve la vida venir, que por su afán de no molestar no lucha por lo que quiere. Aunque al final esta actitud tiene su recompesa, ya que es admirada y querida por los que la rodean, considerándola un ejemplo a seguir, de hecho, las que se tuercen del camino, las encantadoras Miss Beltran, son alejadas de la sociedad que tanto las admiraban y que supuestamente las adoraban.

De ahí la crítica de Austen, la educación que se les daba a las mujercitas de la época, a valorar sólo lo material y lo superficial y no lo que realmente importa que son los principios y los valores que deben estar por encima.

En cuanto a las series y a las diferentes Fanny Price, no sé con cual quedarme, son las dos estupedas y cada una les da su toque, la primera, en la del 99, me parece menos dulce más independiente y con más fuerza del carácter, la segunda por el contrario, la veo más dulce, sumisa, más imaginativa.

La historia nos cuenta la vida de Fanny Price. Los Price tienen una vida humilde, la Sra. Price, que proviene de una familia respetable, hizo un mal matrimonio. Pasados los años, vive en una casa con un montón de niños y un marido que solo hace que pasarse el día con sus amigotes en el puerto. Sus hermanas, una de ellas casada con Lord Beltran, en un acto de generosidad, deciden ocuparse de la educación de una de sus hijas, para ello se la llevarán a Mansfield Park con sus primos. Queda claro desde el principio, que la educación, que recibirá Fanny, una muchacha muy sensible, delicada e inteligente, no será la misma, las hijas de la Lady Beltran tendrán que ser tratadas como tal, lo que deja a Fanny como una dama de compañía, chica para todo, de los Beltrán. Allí sóla, contará con la ayuda y el consuelo de su primo Edmund, el segundón de la familia y con vocación religiosa. Así pasarán los años hasta que la entrada de dos hermanos cambie sus vidas y la de Mansfield para siempre.

Y hasta aquí puedo leer...

Un besazo a todos

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